La pupila de su ojo no solo percibe luz, también información numérica, de acuerdo con un estudio
La pupila es la abertura que se encuentra en la parte central del iris y es responsable de regular la entrada de luz en el ojo permitiendo que la retina inicie el proceso de visión. El tamaño de las pupilas cambia dependiendo de la iluminación del entorno , se contrae en condiciones de mucha luz (pupila mas pequeña) y se dilata en condiciones de poca luz ( pupila más grande). El reflejo de la luz en la pupila es seguramente la respuesta fisiológica más espontanea.
Una investigación realizada por la facultad de Psicología de la Universidad de Sídney en colaboración con la Universidad de Florencia en Italia, demostró la reacción de la pupila a objetos y patrones en su campo de visión. Los investigadores observaron las pupilas de 16 participantes a los que se les presentaron imágenes con puntos blancos o negros, aislados y conectados por líneas. Como resultado las pupilas cambiaron de tamaño según la cantidad, dicho de otra manera entre mas objetos percibía mayor era su dilatación por el contrario entre menos objetos distinguía mas se contraía.
Se debe agregar que este reflejo automático llamado “numerosidad percibida” es susceptible de adaptación, mejor dicho percibir espontáneamente la cantidad así como las propiedades visuales primarias de una escena como el color ,el contraste, la distancia, el tamaño, el movimiento y la velocidad.
“Este resultado muestra que la información numérica esta intrínsecamente relacionada con la percepción. Esto podría tener importantes implicaciones practicas. Por ejemplo, esta capacidad esta comprometida en la discalculia , que es una disfunción en el aprendizaje matemático, por lo que nuestro experimento puede ser útil para la identificación temprana de esta condición en niños muy pequeños”, explicó en un comunicado la Dra. Elisa Castaldi, psicóloga y neurocientífica de la Universidad de Florencia en Italia.
Para concluir, es probable que el origen de esta reacción tenga conexión con la necesidad de supervivencia, esta habilidad que la mayoría de los animales comparte y es fundamental en la evolución, concretamente el “sentido numérico” les permite detectar enemigos o cazar.
Esta investigación fue publicada en la revista Nature Communications